Desde hace años, los miembros de la Asociación de Jubilados Publio Falconí Pazmiño enfrentan constantes conflictos debido a disputas y transparencia en la directiva. Los jubilados protestaron reclamando que la actual directiva les ha negado el acceso a varios beneficios, además, expresan su preocupación por una presunta estafa y presunta malversación de fondos, según dijo Javier Humberto Checa, representante de un grupo de socios. Se estima que actualmente podrían ser un aproximado de 1300 socios, mientras que en el año 2015, habían 5000 socios.

Carlos Reyes, Guayas